Un grupo de investigación CEIMAR lidera un estudio para prevenir y controlar la expansión del alga asiática

Este equipo científico, liderado por María Altamirano desde la Universidad de Málaga, está cofinanciado por la Fundación Biodiversidad

Desde su detección en el año 2016 en las costas del estrecho de Gibraltar, el alga parda Rugulopteryx okamurae (Dictyotales, Ochrophyta), procedente de las costas asiáticas del Pacífico, está produciendo impactos medioambientales y socioeconómicos sin precedentes.

La Universidad de Málaga lidera un estudio para avanzar en la prevención y el control de la expansión de esta especie que, actualmente, en España se encuentra en fase de expansión. Un proyecto coordinado por la profesora del departamento de Botánica y Fisiología Vegetal de la UMA María Altamirano, que ha sido seleccionado en la convocatoria de concesión de ayudas para la conservación de la biodiversidad marina en España 2020 de la Fundación Biodiversidad (FBD), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

“Desde su introducción en el estrecho de Gibraltar, en España, el alga asiática muestra una elevada capacidad de dispersión y colonización de nuevas zonas”, explica la investigadora de la UMA, que aclara que esta expansión supone una amenaza para la biodiversidad y los recursos marinos del litoral español.

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Precisamente a través de este proyecto, que contará con un presupuesto de más de 190.000 euros para su desarrollo durante los dos próximos años –del cual la UMA financia el 50 por ciento y la FBD el otro porcentaje restante- se identificarán las ventanas espacio-temporales de vulnerabilidad a la invasión de R. okamurae de especies y espacios marinos protegidos españoles, a partir de aproximaciones de la modelación de su distribución y de estudios de campo, con especial interés en los presentes en las demarcaciónes Estrecho-Alborán y Levantino-Balear.

Asimismo, en el marco de este estudio se realizará una actualización de la situación de la R. okamurae en los espacios protegidos y se transferirá todo el conocimiento generado al sector gestor de estos espacios, así como a la administración pública, con el fin de que pueda ser aplicado en la prevención y detección temprana de la especie para la conservación del patrimonio natural.

Junto a María Altamirano, otros investigadores de la Universidad de Málaga que participan en este estudio son Raquel Carmona (Ecología y Geología), A. Román Muñoz (Biología Animal) y Raimundo Real (Biología Animal). El profesor de Botánica de la Universidad de Granada Julio de La Rosa también forma parte del equipo científico.

Fuente de la información: UNIVERSIDAD DE MÁLAGA